Al borde del precipicio
Brenda Trujillo
Un soplo fantasmal,
Una persistente corazonada.
Mi eco endemoniado,
Anuncia mi destino,
Profiere un llamado,
Para intervenir en mi camino.
Me amenaza con su estrago,
Y su insistente profecía,
Que pretende y declara,
Mi pronta destrucción.
Un soplo aterrador,
Un susurro escalofriante,
Aproxima mi final,
Con mi pena fulgurante,
De no ver ya nunca más,
Tu encanto celestial,
Ya no soporto más,
El desvarío de este mal,
El trance desdichado,
Que anuncia mi descenso.
Me consumo como el fuego,
Inmediato y ardiente,
Para hacerle compañía,
Al lecho mortal.
Se me oprime el corazón,
Al pensar en ese viaje,
Tan temido y persistente,
Socorrido y latente.
Mi memoria me succiona,
De escenarios del pasado,
No asimilo el presente,
Mucho menos el futuro.
Mi alma sufre de inconstancias,
No se despoja de culpas,
Por eso demando,
Una pronta sentencia y que,
Me libren de esta ruina.